- Averigua si tu perro puede comer cuello de pollo
- Descubre sus beneficios y cómo ofrecérselo
La dieta BARF (Biologically Appropriate Raw Food) se ha convertido en una opción cada vez más popular para los dueños de perros que buscan proporcionar una alimentación más natural y saludable a sus mascotas, es por eso que muchos de vosotros os preguntáis si los perros pueden comer cuello de pollo. Dentro de esta dieta, los cuellos de pollo juegan un papel importante. Pero, ¿qué beneficios ofrecen y cómo pueden ser incorporados de manera segura en la dieta de tu perro?
El resumen de la lectura
Beneficios nutricionales de los cuellos de pollo
Los cuellos de pollo son una fuente rica en proteínas, esenciales para el crecimiento y desarrollo de tu perro. Además, son ricos en calcio y fósforo, que contribuyen a la salud ósea y dental.
Valor nutricional del cuello de pollo crudo
Componente | Cantidad por 100 g |
---|---|
Calorías | 92 |
Proteínas | 16 g |
Grasas | 4 g |
Calcio | 115 mg |
Fósforo | 113 mg |
Cuello de pollo crudo o cocido, ¿cómo es mejor ofrecérselo a un perro?
Es importante recordar que los cuellos de pollo para la dieta BARF deben ser crudos. Los huesos cocidos pueden astillarse y representar un riesgo para tu perro. Al comprar cuellos de pollo en tiendas especializadas en dieta BARF, puedes estar seguro de que están libres de patógenos dañinos.
Aun así, es importante recalcar que puedes utilizar cuello de pollo en la elaboración de caldo de pollo para perros, aprovechando posteriormente la carne cocida y desechando el hueso.
¿Qué hay del cuello de pollo deshidratado?
La versatilidad del mercado se amplía a medida que la conciencia de los propietarios por la salud de sus peludos crece. Y es que, los snacks deshidratados son todo un must en la despensa si quieres premiar a tu perro de manera saludable. Es por eso que podemos encontrar cuello de pollo deshidratado como snack canino.
El cuello de pollo deshidratado es práctico. Es fácil de almacenar, no requiere refrigeración y es perfecto para llevar en viajes o paseos largos con tu perro. Además, al igual que el cuello de pollo crudo, puede ayudar a mantener la salud dental de tu perro gracias a su textura crujiente.
Es funcional, duradero y a tu perro le encantará. Pero sinceramente, si quieres ofrecer cuello de pollo a tu mascota, crudo es mucho más nutritivo y jugoso.
Tamaño y raza: ¿cuello de pollo o de pavo?
El tamaño y la raza de tu perro pueden determinar si los cuellos de pollo son la opción más adecuada. Usaremos cuello de pollo en los siguientes casos:
- Perros pequeños (no mini o toy).
- Cachorros de perro grande iniciados en BARF.
- Perros de boca estrecha.
- Perros molosos medianos que se están iniciando en dieta BARF.
Para perros grandes o de razas molosas, se recomienda el uso de cuellos de pavo, que son más grandes y proporcionan un desafío de masticación adecuado. Si es tu caso, te recomendamos visitar este otro artículo sobre los cuellos de pavo para perros, incluye además un vídeo donde mis labradoras ingieren uno.
¿Y si mi perro se traga el cuello de pollo entero?
No hay que alarmarse si tu perro se traga un cuello de pollo entero si pasa por la tráquea y llega al tubo digestivo, en el caso de que el perro se ponga a toser o a hacer intentos de tragar sin existo, intenta retirar el trozo con las manos o llévalo con urgencia al veterinario.
Sinceramente, esto es casi improbable que suceda. El cuello de pollo es un hueso carnoso considerado fácil y seguro.
Los perros están preparados para digerir este tipo de alimentos sin obstrucciones en los intestinos, aun así, tu eres quien debe valorar que alimentos ofreces a tu peludo, ya que es tu responsabilidad.
La dieta BARF ofrece una forma de alimentar a tu perro que se alinea más estrechamente con su dieta ancestral. Los cuellos de pollo, ricos en nutrientes y naturales, son un componente valioso de esta dieta. Recuerda siempre comprarlos en tiendas especializadas y ofrecer el tamaño adecuado para tu perro.